Miel Cruda de TOMILLO

La miel cruda de TOMILLO Apicum la producen las abejas a partir de la flor de tomillo del levante Mediterráneo donde se da un clima suave y cálido.

Se trata de un arbusto perenne y leñoso, que suele crecer de manera silvestre en condiciones de sol y que no necesita muchos cuidados.

El tomillo es una planta aromática muy usada como condimento, en la gastronomía Mediterránea, y a la que se le atribuyen muchas propiedades beneficiosas para la salud.

En el ámbito culinario es muy fácil encontrar alimentos condimentados con tomillo. Sin embargo, su utilización en la miel es muy apreciada por el consumidor siendo una de las mieles más tradicionales.

Propiedades de la Miel Cruda de TOMILLO

La miel cruda de TOMILLO es monofloral, proviene del néctar de las flores de las plantas de tomillo. Popularmente se ha tomado por sus efectos beneficiosos para mejorar la digestión. También ayuda a prevenir las infecciones de garganta y ayuda a regular la tensión arterial. Recomendada también para ayudar a superar el agotamiento físico y mental, tomando una cucharada diaria.

Aroma y color de la miel Cruda de TOMILLO

Resalta su particular aroma intenso, peculiar, fuerte, muy floral y típico de esta variedad botánica: intenso y balsámico. Su color es ámbar oscuro o anaranjado, en ocasiones amarillento depende, en gran medida, de la variedad de tomillo.

Textura y sabor de la miel Cruda de TOMILLO

Su textura es algo espesa muy agradable al paladar. Su cristalización es frecuente en condiciones frías, pasando a un estado menos fluido. Aunque recupera pronto su aspecto de miel líquida, con tan solo poner el frasco al baño maría a una temperatura que no supere los 40°C.

Su sabor es dulce e intenso al mismo tiempo, con una persistencia en el paladar que nos recuerda a la planta del tomillo sin llegar a ser fuerte.